Pyongyang, 21 de agosto (ACNC) -- Los gángsteres de la capa militar títere del Sur de Corea libran con frenesí los ejercicios militares conjuntos Ulji Freedom Guardian de gran tamaño contra la República Popular Democrática de Corea en contubernio con Estados Unidos, debido a lo cual en la Península Coreana se crea la situación muy tirante que posibilite estallar la guerra en cualquier momento.
El presente simulacro es la provocación militar sin precedente en la historia tanto en el tamaño y el carácter como en el contenido de entrenamiento, lo que significa la declaración de guerra abierta contra la RPDC.
Así apunta el diario Rodong Sinmun en un artículo individual difundido este viernes y prosigue:
Ahora en los susodichos ejercicios se introduce la división combinada del Sur de Corea y EE.UU. con la misión operacional de "eliminar la Dirección" de la RPDC y "ocupar Pyongyang" y todos los puestos del mando de operaciones están desplegados, razón por la cual el entrenamiento bélico llega cada día más al clímax.
Nadie puede conocer que esta provocativa y peligrosa campaña de agresión a la RPDC se convierta en la guerra total en cualquier momento.
EE.UU. y la banda títere pretenden llevar a toda costa la situación a la coyuntura del estallido de guerra tomando el incidente de la "explotación de minas" como buen pretexto para ejercicios militares conjuntos.
Debido a tales locuras de EE.UU. y los gángsteres de la capa militar surcoreana, el estallido de guerra nuclear en la Península Coreana es cuestión de tiempo y el destino de la nación coreana está amenazado a cada momento.
Puesto que se ha revelado el hecho de que el objetivo del presente simulacro es atentar con las fuerzas armadas el digno régimen de la RPDC, ésta tomará sucesivamente más fuertes medidas de autodefensa para defender la soberanía y el interés supremo del país. Esto es el merecido derecho.
Hace unos días, la RPDC, por medio de la declaración del portavoz del Comité de Defensa Nacional, aclaró solemnemente que el desarrollo de los ejercicios bélicos conjuntos Ulji Freedom Guardian y su intensificación nos obligarán a tomar las contramedidas militares más fuertes, lo que no es una palabra vana.
El presente simulacro es la provocación militar sin precedente en la historia tanto en el tamaño y el carácter como en el contenido de entrenamiento, lo que significa la declaración de guerra abierta contra la RPDC.
Así apunta el diario Rodong Sinmun en un artículo individual difundido este viernes y prosigue:
Ahora en los susodichos ejercicios se introduce la división combinada del Sur de Corea y EE.UU. con la misión operacional de "eliminar la Dirección" de la RPDC y "ocupar Pyongyang" y todos los puestos del mando de operaciones están desplegados, razón por la cual el entrenamiento bélico llega cada día más al clímax.
Nadie puede conocer que esta provocativa y peligrosa campaña de agresión a la RPDC se convierta en la guerra total en cualquier momento.
EE.UU. y la banda títere pretenden llevar a toda costa la situación a la coyuntura del estallido de guerra tomando el incidente de la "explotación de minas" como buen pretexto para ejercicios militares conjuntos.
Debido a tales locuras de EE.UU. y los gángsteres de la capa militar surcoreana, el estallido de guerra nuclear en la Península Coreana es cuestión de tiempo y el destino de la nación coreana está amenazado a cada momento.
Puesto que se ha revelado el hecho de que el objetivo del presente simulacro es atentar con las fuerzas armadas el digno régimen de la RPDC, ésta tomará sucesivamente más fuertes medidas de autodefensa para defender la soberanía y el interés supremo del país. Esto es el merecido derecho.
Hace unos días, la RPDC, por medio de la declaración del portavoz del Comité de Defensa Nacional, aclaró solemnemente que el desarrollo de los ejercicios bélicos conjuntos Ulji Freedom Guardian y su intensificación nos obligarán a tomar las contramedidas militares más fuertes, lo que no es una palabra vana.
