Ahora la comunidad internacional admira la realidad de la Corea socialista que avanza sin vacilación alguna, con su digna soberanía, aún en las sanciones y el bloqueo impuestos por Estados Unidos y sus seguidores. En este sentido, presta extraordinaria atención al Máximo Dirigente Kim Jong Un de la RPD de Corea.

Se estima que es el más ideal estadista con excelentes cualidades y rasgos.

Con nobles virtudes y sublime visión de su pueblo, ama infinitamente al pueblo y practica una genuina política de aprecio al mismo. Los coreanos califican su política como política de aprecio, respeto y amor al pueblo.

“¡Servir al pueblo!” y “¡Todo para el pueblo!” son su ideal político. Toma por la meta suprema de su actividad depararle mejor vida al pueblo y prioriza y absolutiza el interés, el agrado y la comodidad del mismo en todos los aspectos. Para él el patrón para evaluar un edificio o alguna cosa es si ello entra en agrado del pueblo o le da comodidades.

Visita a todas partes del país por la vida más cómoda, desahogada y próspera del pueblo. Y en repetidas ocasiones advierte a los cuadros dirigentes del Estado que sirvan con total entrega al pueblo.

Los coreanos lo consideran y veneran como su padre y maestro.

Asimismo, se estima que el mandatario coreano es un genial práctico con extraordinaria capacidad de despliegue y perseverancia.

Como es conocido por todos, la economía de Corea, por el prolongado embargo y bloqueo de Estados Unidos, se ve restringida en el desarrollo. Se encuentra en las condiciones en las que si fuera otro país no puede esperar la existencia misma del Estado, pero, bajo la dirección de Kim Jong Un, la RPD de Corea conoce mayor fortalecimiento con el paso del tiempo. El lema de dar alas a la fuerza de fortalecerse a sí mismo lanzado por él disfruta de pleno apoyo de los coreanos y los despierta activamente.

El mandatario coreano enseña la manera del aumento de la producción y la modernización con aguda perspicacia y extraordinaria clarividencia.

Gracias a su dirección se construyen y ponen en funcionamiento muchas fábricas y empresas modelo adecuadas a las condiciones del país, modernizadas informatizadas y fundamentadas en las ciencias y se aplican en todo el país avanzados métodos de administración y experiencias. Como resultado, el potencial de la industria pesada centrada en la de defensa nacional crece vertiginosamente, y la industria ligera se desarrolla visiblemente y la vida poblacional se mejora de día en día.
Desde el punto de vista de la fuerza militar, un importante índice de la evaluación del poderío nacional la RPD de Corea ya es una potencia militar de categoría mundial provista incluso de los medios estratégicos ultramodernos y la bomba de hidrógeno.

“Últimamente la RPD de Corea dirigida por Kim Jong Un se ha cambiado tanto que da nueva imagen a la comunidad internacional”, comentó la comunidad internacional, lo cual no es casual.

Kim Jong Un tiene firme credo, coraje y espíritu de independencia.

Ahora en el mundo hay más de 200 países. Rige parcial orden internacional según el cual unos países específicos ejercen la arbitrariedad y los países grandes oprimen a otros.

Kim Jong Un, considerando la independencia como la vida, no tolera nunca la coacción y el despotismo de las potencias. Particularmente se opone con resolución a la hegemonía y la tentativa de la unipolarización de Norteamérica y se enfrenta con dureza al imperio para defender con firmeza la justicia.

Si Corea que hace más de 100 años era país débil, hoy en la arena internacional cobra fama como país que dice con todo derecho lo que quiere, país con su propio criterio, como potencia en la independencia, se debe, en fin de cuentas, a su dirigente.

Los medios de prensa del mundo comentan: “Es político popular con fervorosa humanidad”, “Es dirigente que fortalece extraordinariamente el poderío nacional de Corea”, “Es líder joven que domina al imperio y le propina sucesivos y duros golpes, poniéndolo en la condición pasiva”. Es una correcta e imparcial visión.

La RPD de Corea liderada por Kim Jong Un aparecerá ante el mundo como país más poderoso.