La severa situación causada por la locura militar de Estados Unidos y Surcorea en la península coreana, se agrava aun más.

En fechas recientes se pusieron en práctica las maniobras militares conjuntas de Estados Unidos y Surcorea de máxima envergadura "Vigilant Storm" desde el 31 de octubre hasta el 5 de noviembre en que se movilizaron centenares de aviones de combate incluso el bombardeo estratégico de arma nuclear.

A decir la verdad, esta actividad es la provocación abierta de tensar a propósito la situación de la región y el ejercicio de intenso carácter agresivo que apunta directamente a nuestro Estado.

Son intolerables todas las acciones recientes desafiadoras de ellos que han realizado los ejercicios agresivos en gran escala.

Para manifestar la intransigente y cabal voluntad de enfrentamiento y la patente seguridad de su capacidad militar de las fuerzas armadas de la República enfrente a la severa situación y añadir la confianza en la segura victoria a la convicción de venganza de los oficiales y soldados de nuestro ejército el Estados Mayor desplegó la operación correspondiente del 2 al 5 de noviembre.

Por la mañana del primer día en la operación las unidades de misiles ubicadas en la provincia Phyong-an del Norte lanzaron 4 misiles tácticos de ojivas esparcidas y de penetración al subsuelo tomando por blanco una isla inhabitada delante del Complejo Hidráulico del Mar Oeste al simular el ataque a la base militar aérea de los rivales.

En horas de la mañana y la tarde las unidades antiaéreas de fuerza aérea acantonadas en las costas de los Mares Este y Oeste dispararon 23 misiles tierra-aire para el ejercicio de aniquilar los blancos de disímiles alturas y distancias.

En la relación de que ellos cometieron la fechoría de reaccionarnos con disparo en las aguas altas de nuestra parte con proyectiles teledirigidos aire-tierra y planeados argumentando que han caído nuestros misiles cerca de las aguas jurisdiccionales de Surcorea golpearon los blancos distanciados a 590, 5km en agua alta del mar frente a la ciudad Ulsan de Surcorea (35°29′51,6″de latitud y 130°19′39,6″ de longitud) desde la provincia Hamgyong del Norte con dos misiles cruceros estratégicos.

En el segundo día de la operación ordenaron realizar el lanzamiento de prueba de misil importante para verificar la fiabilidad de la función de la ojiva de capacidad especial que neutraliza el sistema de mando operacional del enemigo según la petición de la Academia de Ciencias Militares y como un eslabón de reacción para aplastar la locura persistente de provocación de guerra de los enemigos dispararon respectivamente 5 proyectiles de lanza-cohete supergrande y diversos misiles tácticos y 46 proyectiles de lanza-cohete de larga distancia hacia el Mar Este.

  El día 3 tuvo lugar la operación de movilización general combativa de gran tamaño de las fuerzas aéreas en que despegaron 500 aviones de varios tipos durante las 3 y 47 minutos con el objeto de mostrar la voluntad de confrontación contra el entrenamiento combinado aéreo del enemigo.

El día 4 dispararon los 2 misiles balísticos tácticos cargados de la ojiva esparcida y 2 proyectiles de autopropulsión superpoderosa tomando por blanco el islote inhabitado ante el Complejo Hidráulico del Mar Oeste, al simular el ataque a la base aérea de los enemigos.

Todas operaciones han conquistado su objetivo y se evaluó con satisfacción la capacidad de realización de operación desarrollada de nuestro ejército.

Según la operación las fuerzas armadas de nuestra República respondieron activamente al entrenamiento combinado aéreo de los enemigos y elevaron la confianza que pueden fracasar la superioridad de las fuerzas aéreas rivales. Y aseguraron completamente la postura y capacidad de confrontación militar de nuestro ejército y consolidaron más la voluntad de confrontación absoluta.

La operación militar de confrontación de EPC es nuestra contesta perfecta que nuestra reacción será tanto más consistente e implacable cuanto más se perpetuan con obstinación las maniobras militares agresivas de los enemigos; esto será nuestro principio y rumbo de acción de nuestras fuerzas armadas que se mantendrán de modo inalterable en el futuro también.

El Estado Mayor General del EPC declara una vez más responder con medidas prácticas militares continuas, firmes y predominantes contra ensayos militares de guerra de los enemigos de toda índole.



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